lunes, 5 de marzo de 2018

Hacerse Mayor

A veces me pregunto qué significa realmente hacerse mayor, porque por lo visto para los demás no significa lo mismo que para mí. En mi cabeza, hacerse mayor significa tener responsabilidades, asumir las consecuencias de tus actos, saber que la vida va más allá de ir al colegio, estudiar, sacarte una carrera y conseguir un trabajo. Ser mayor es poder tomar tus propias decisiones y hacer lo que quieras cuando quieras siempre que esté dentro de la legalidad. Pero al parecer estoy equivocada, al parecer hacerse mayor son sólo números que vas sumando a tu edad, números que no significan nada.
Estoy harta de que me mangoneen, de que me digan lo que creen que es mejor para mí, porque eso no tiene por qué ser lo mejor para mí. Yo no quiero un trabajo estable en el que me paguen bien si no es un trabajo que me guste, que me haga sentir realizada. Yo no quiero ser profesora, no es lo mío, no me gusta, no quiero hacerlo. Yo quiero hacer algo que me haga feliz, algo con lo que si me tenga que levantar a las 6 de la mañana lo haga con gusto, con ganas de llegar y decir: "buenos días" por qué son unos buenos días.
Ya me he hecho mayor. Sé que todavía soy muy joven y que me falta mucha experiencia y que posiblemente me equivoque una y mil veces, pero de verdad que estoy harta de que me traten como a una niña. Tengo 21 años y en tres días cumplo 22, se que no es mucho, pero a la vez es suficiente. Se lo que quiero hacer, se a donde voy, cuál es mi camino y a dónde quiero llegar, así que lo único que pido es un poco de respeto, nada más y nada menos, solo un poco de respeto y que me den la oportunidad de cometer mis propios errores, ya que de los errores se aprende, y si no los cometo yo, nadie puede hacerlo por mí.